¿De dónde proviene la maldad?

¿Si Dios creó a Satanás, entonces Dios creó la maldad?

Ciencia y Espiritualidad


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La pregunta tan conocida nos la responde el Señor:

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Preguntó el rey Lamech:

Dios, si eres bueno y perfecto desde la eternidad, y eres incapaz de pensar malvadamente, entonces ¿de dónde vino la maldad de Satanás y la maldad en nosotros los seres humanos?

El Señor le contestó:

"Mi querido Lamech, tu pregunta suena muy sabia; pero te digo: ¡ella es muy humana!

Sin embargo, quiero darte una respuesta y, así, resolver tu pregunta:

Delante de Mis Ojos no existe en absoluto ningún mal. Yo sólo veo diferencias en los efectos de Mi Voluntad. Y estos efectos son siempre buenos, tanto el infierno como en el cielo, durante la creación como durante la destrucción.

Pero delante de los ojos de los seres creados se considera solo una parte como buena y se la coloca como tal. Es decir: solo la porción afirmativa es considerada como buena y sólo ella se la coloca como la parte indispensable para subsistir junto a Mí y en Mí. Esta porción consiste en la parte que mantiene las cosas y el lado que crea las cosas.

Pero el lado poderoso en el que se disuelven las cosas o se las destruye es considerado como malvado ante la visión de la criatura. Porque la criatura no cree que esta parte pueda existir junto a Mí y dentro de Mí. Es decir, que la criatura no tiene la capacidad de pensar que Dios pueda actuar de esa manera.

Pero dentro de Mí, tanto el «» como el «no» son buenos. Porque con el «» Yo creo, y con el «no» Yo ordeno, gestiono y conduzco todo.

Pero para la criatura solo el «» es bueno y el «no» es malo. Esto será así mientras ella no se haya convertido completamente en Uno con el «» dentro de Mí y en donde también pueda subsistir en el «no».

En otras palabras: para Mí no existe Satanás ni infierno. Pero sí existe para la criatura cuando ella se ve a sí misma y a los hombres de esta Tierra, porque en esta Tierra se trata de la educación de Mis Hijos.

Hay innumerables otros mundos o planetas en los que no se conoce a Satanás y, por lo tanto, tampoco se conoce al «no», sino solo el «» dentro de sus circunstancias.

¡Mira, así son las cosas! La Tierra es un jardín de la infancia, y es por eso que siempre hay muchos gritos y ruidos vanos; pero Yo veo todo esto con ojos diferentes a los tuyos que eres un ser humano en la Tierra."